Muchas personas piensan que la ropa interior es simple, solo es ponérsela, ajustarla en la zona correcta y listo, ¿o no? Pues no, no se trata solo de ponerte cualquier pedazo de tela, hay que poner atención en el corte, el ajuste y sobre todo en el material, de lo contrario puedes acabar con irritación, lesiones, infecciones y hasta hongos nada agradables para tu piel, tu vida sexual y tu comodidad diaria.
Desafortunadamente, las personas simplemente eligen su ropa interior por el diseño y el color, sin llegar a comprender la importancia de elegir la tela correcta, que no solo tiene que ver con la comodidad, sino con su salud en general.
Recuerda que tú también tienes la piel sensible, sobre todo en los glúteos, caderas, ingles y otros spots muy específicos de la entrepierna y las telas rasposas no solo te causarán incomodidad, sino que te irritan y te causan comezón, cosa que puede salir terriblemente mal, ya que puede producir irritación, dermatitis por contacto y reacciones alérgicas.
Materiales como el poliéster y la seda artificial son de las más problemáticas para la mayoría de las personas, por ello, elegir la mejor ropa interior para hombre es obligatorio.
Es por eso que en Sinvergüenza nos preocupamos por el tipo de productos que fabricamos y vendemos, buscamos que sean muy buenos para tu piel, que duren más que otras marcas y sobre todo que no contaminen el planeta.
La ropa de Sinvergüenza, fabricada con tela micro modal de Tencel, es duradera y de la más alta calidad, además de ser 100% biodegradable en las condiciones adecuadas. La suavidad y porosidad de las fibras Micro Modal permite que tu cuerpo se mantenga fresco y seco, todas estas cualidades en conjunto con las costuras planas te ayudan a proteger la zona más sensible de tu piel.
Por lo tanto, cuando usas underwear de Sinvergüenza, no solo estás contribuyendo a la preservación del medio ambiente, sino que también tendrás beneficios directos para tu cuerpo, evitarás rozaduras, incomodidad, te mantendrás fresco y seco por más tiempo, y al evitar estar sudado, reduciendo la propagación de bacterias que pueden generar mal olor.
Fuente: fundacionpielsana.es
